Versículo del día 23/07/2013.

Salmos 30:2 "Jehová Dios mío, A ti clamé, y me sanaste."

Cuenta una historia un hermano, de que hace años hubo un tiempo en que se alejo de Dios, se mantuvo meses enfermo, le realizaron muchos estudios tratando de encontrar la causa de su enfermedad, sin tener éxito.

Un sábado comenta el hermano, después de haber asistido a una reunión de varones, entendí que Dios me estaba llamando y que no debía resistirme más, ese mismo sábado estaba terminando uno de los tratamientos que me habían recetado, y para el domingo empecé de nuevo con los síntomas, pero fue hasta la noche del lunes que después de ponerme a cuentas con Dios, clamé por mi sanidad. El martes por la mañana no sentía ningún síntoma, Dios me había sanado, me practicaron dos estudios más y nada se encontró, la obra de Dios es perfecta.

Si estas enfermo sea del alma o del cuerpo, ponte a cuentas con Dios, arrepientete, perdona y perdonate, clama a Dios y ten la seguridad que el te sanará.