1. Trabajadores no deseables. En este segmento ubicamos a los trabajadores que necesitan una supervisión exagerada, que no tienen iniciativa, que terminan una actividad y no empiezan otra si no esta quien les diga que hacer, aun cuando tengan tareas previamente asignadas. También ubicamos a trabajadores que aunque ya realizan sus tareas solos, tienden ha ser impuntuales, faltistas o bien que de todo se quejan y contagian con sus inconformidades a los miembros del grupo más vulnerables.
2. Trabajadores aceptables. Aquí encontramos a los trabajadores que ayudan a las empresas a mantenerse activas, son eficientes, cumplen con las tareas que se les encomienda y difícilmente muestran rasgos de irresponsabilidad, de hecho podemos ver en este grupo a trabajadores que aun con alguna enfermedad, asisten a trabajar, siempre que no los incapacite totalmente, son trabajadores en los cuales se puede confiar para no quedar mal con los clientes y que tienen un gran compromiso consigo mismos y son preocupados de su imagen, estos trabajadores algunas veces muestran dificultades para trabajar en equipo pero solos son maquinitas de trabajo.
3. Trabajadores deseables. Este segmento como se dice, se cuece aparte, aquí hay trabajadores que además de no necesitar supervisión para trabajar, son confiables al 100%, su compromiso no es solo con ellos mismos sino con la empresa, tienen iniciativa y se mantienen en un proceso de mejora continua, se esfuerzan por trabajar con excelencia, conforme avanza su antiguedad crece su conocimiento y se capacitan para realizar más actividades en su jornada, hacen las cosas bien y a la primera, por tanto son rentables y productivos, su eficiencia en el trabajo generalmente los lleva a catapultarse en los puestos hasta llegar a los niveles jerárquicos más altos, trabajan en equipo y son lideres que forman equipos. También podemos encontrar en este segmento a trabajadores que aunque no estén interesados en niveles jerárquicos altos, son pilares en el trabajo de equipo.
La Bíblia nos da un gran consejo con respecto a que tipo de trabajadores debemos ser, en el libro de Proverbios 6:6-8
6:6 "Ve a la hormiga, oh perezoso, Mira sus caminos, y sé sabio; 7 La cual no teniendo capitán,
Ni gobernador, ni señor, 8 Prepara en el verano su comida, Y recoge en el tiempo de la siega su mantenimiento."
6:6 "Ve a la hormiga, oh perezoso, Mira sus caminos, y sé sabio; 7 La cual no teniendo capitán,
Ni gobernador, ni señor, 8 Prepara en el verano su comida, Y recoge en el tiempo de la siega su mantenimiento."
Este pasaje nos ilustra las características de un trabajador de manera muy sencilla, en primera instancia esta dirigido a un perezoso, es decir eso no lo debemos ser, de entrada deberíamos ser diligentes y no perezosos, veamos lo que dice el mismo libro de Proverbios 13:4 "El alma del perezoso desea, y nada alcanza; Mas el alma de los diligentes será prosperada.", aquí es muy clara la contraposición.

Mas adelante nos habla de que las hormigas no necesitan supervisión, "7 La cual no teniendo capitán, Ni gobernador, ni señor,..." y por otro lado, que son previsoras "8 Prepara en el verano su comida, Y recoge en el tiempo de la siega su mantenimiento.", esto significa que se adelantan a las necesidades, nosotros como trabajadores debemos adelantarnos a las necesidades de nuestro Jefe, de nuestros Compañeros de Trabajo, de nuestros Clientes, etc.
Si usted observa a las hormiguitas, regularmente llevan comida hacia el hormiguero, y esa comida no es solo para la hormiguita que lleva, sino para toda la comunidad, esto nos habla de un compromiso con su comunidad y no un compromiso individual.
Seguramente también como yo usted ha visto trabajar en equipo a las hormigas, ya sea atacando a algún insecto más grande o bien trasladando un trozo de alimento entre varias de ellas.
Podríamos buscar más características pero creo que son suficientes para entender que debemos esforzarnos por ser trabajadores deseables, si tu no lo eres aun, hoy puedes realizar los cambios necesarios y sentirte satisfecho.
Dios te Bendiga.